Dieron e hicieron mucho por la patria, pero el lugar donde reposan hoy sus restos, deja mucho que decir. Tumbas como las de Juan Demóstenes Arosemena, Belisario Porras, Esteban Huertas, José Antonio Remón Cantera, Ascanio Arosemena, y hasta del primer presidente de la República, Manuel Amador Guerrero, entre otras, denotan un descuido total en el Cementerio Amador. Otras han sido vandalizadas. ¡Qué tristeza! ¿Dónde está la vigilancia?

En este camposanto, donde fueron sepultados los históricos personajes, se han llevado de sus tumbas los aros de bronce, jarrones decorados, han roto vitrales, el moho ha dicho presente y hasta la hierba quiere hacerle compañía. En otras se puede hacer dibujos con la cantidad de polvo y limo que han recogido.

DIAaDIA consultó a Gretel de Tarté, de Servicios Funerarios de la Alcaldía de Panamá, sobre esta irregularidad, pero su reacción fue: "Por qué hiciste eso. Tenías que pedir permiso. Voy a hablar con David Lindo, de Comunicaciones, y en unos minutos te llamo". Nunca fue cierto.

DIAaDIA contactó a David Lindo, director de Comunicaciones, quien aseguró que la Alcaldía invirtió el año pasado 282 mil 795 dólares en mejoras a los camposantos.

Indicó que se reforzará la vigilancia en estos lugares de descanso eterno para evitar que se registren hechos vandálicos como estos.

Frente a este panorama, los señores que pintan tumbas y hacen lápidas comentaron: "Esto lo deben ver los políticos. Dios no quiera que sean presidentes de la República y terminen en las mismas condiciones".