Los "Galácticos" respiran en la liga. Zidane, Ronaldo, Raúl y Owen fueron los artífices ayer de la victoria del Real Madrid por 4-2 al líder Barcelona, en un vibrante clásico del fútbol español que prolonga y pone en suspenso quién será el campeón.

La emoción está servida cuando faltan siete jornadas. El triunfo devuelve al Real Madrid a la lucha por el título, aunque los seis puntos que separan a ambos todavía son una renta bastante holgada para el Barcelona.

Otra ventaja para el equipo de Rijkaard es que en caso de empate al final, sería campeón el Barca por mejor diferencia de goles entre ellos, ya que en el Camp Nou ganó al Madrid por 3-0.

El Real Madrid buscó desde el principio, con mucha más fe y decisión, la victoria. A los siete minutos, una internada por la derecha de Ronaldo, con centro templado al segundo palo, fue rematada a gol de cabeza por Zidane.

El Barcelona seguía adormilado y de ello se aprovechó a los 20 minutos Ronaldo para rematar a placer de cabeza un servicio de falta de Beckham ante la pasividad de la zaga azulgrana.

La tensión volvió por todo lo alto ocho minutos después, cuando el camerunés Eto’o sorteó a Helguera y batió por bajo a Casillas para acortar distancias.

Ya en el descuento del primer tiempo, un servicio desde la izquierda de Roberto Carlos lo remachó a la red el capitán Raúl.

La puntilla la puso el inglés Owen, por quien apostó Luxemburgo en detrimento de Figo, con el cuarto gol a los 64 minutos que sellaba el triunfo blanco.

Ronaldinho, difuminado hasta ese momento, marcó de espléndido derechazo en falta directa el segundo gol del Barca a los 72 minutos.

NUEVA CARA

Ronaldo Nazario rompió su sequía goleadora que rozaba los tres meses en el estadio Santiago Bernabéu.