Es importante que los adultos también tengamos las vacunas contra enfermedades contagiosas, particularmente si padecemos de complicaciones crónicas o enfermedades, tales como asma o diabetes. Préstele atención a la lista de vacunas que un adulto debe tener:

• Vacuna contra la influenza (Flu): Cada año si está en alto riesgo.

• Vacuna contra la neumocócica (neumonía): Si está en alto riesgo y no ha sido vacunado anteriormente.

• Vacuna contra el tétano-difteria: Cada 10 años.

• Vacuna contra la rubéola: Para mujeres en las edades de procreación y todo el personal médico nacido después del año 1956, si no está inmunizado.

• Vacunas contra sarampión, paperas y rubéola (MMR): Todo adulto nacido después de 1956.