Laura regresa acompañada de su familia al orfanato donde creció, para convertirlo en una residencia que acogerá a niños discapacitados. Ese nuevo y extraño entorno estimula la imaginación de su hijo, que comienza a dejarse llevar por juegos de fantasía cada vez más intensos e inquietantes. Las situaciones irán adquiriendo un aire cada vez más perturbador, lo que hará que Laura empiece a sospechar que entre esas paredes hay algo más que muebles viejos y polvo.
DRILLBIT TAYLOR
Todo comienza en el primer día de clases, cuando un trío de ansiosos alumnos del primer año - el gordo Ryan (Troy Gentile, Nacho Libre), el super delgado Wade (el debutante Nate Hartley) y su chaparro compañero Emmit (David Dorfman, El Aro) - se convierten en el blanco instantáneo del psicópata graduando del colegio, Filkins (Alex Frost, Elefante), el mayor abusador de la escuela.
Como lo que ellos esperaban que fueran los mejores años de sus vidas súbitamente se convierten en un infierno diario, los muchachos comprenden que únicamente les queda una salida - contratar a su guardaespaldas personal.
Entra en juego Drillbit Taylor (Owen Wilson), no el mejor, pero sí definitivamente el más económico de los mercenarios, pistoleros y guardaespaldas que contestan su anuncio en el Internet.
Drillbit posee una férrea determinación, es peligroso y hábil en operaciones clandestinas y artes marciales exóticas. También es un fraude total.
LA SEñAL
Es el año 1952 y mientras Eva Perón agoniza, un mediocre detective privado, Corvalán, se ve envuelto en una historia de traición y ambiciones. Contratado por Gloria, una bella y misteriosa mujer, para lo que parece ser un rutinario trabajo de seguimiento, descubrirá poco a poco, un violento entramado de venganza y ambición. A pesar de la oposición de Santana, su amigo y socio en la agencia de investigaciones, Corvalán decide seguir adelante con el caso sabiendo que una sola decisión errónea puede conducirlo hacia su destino más trágico.
