
Rommel hijo siempre estará agradecido de la educación que le dio su padre.
Foto: E. BARRIOS/ R. BARRIOS
Rommel hijo siempre estará agradecido de la educación que le dio su padre.
Foto: E. BARRIOS/ R. BARRIOS
Rommel hijo siempre estará agradecido de la educación que le dio su padre.
Foto: E. BARRIOS/ R. BARRIOS
En esta casa hirieron a don Rommel.
Este medio le hizo una publicación en vida, por su trabajo.
Rommel hijo siempre estará agradecido de la educación que le dio su padre.
Foto: E. BARRIOS/ R. BARRIOS
En esta casa hirieron a don Rommel.
Este medio le hizo una publicación en vida, por su trabajo.
Rommel hijo siempre estará agradecido de la educación que le dio su padre.
Foto: E. BARRIOS/ R. BARRIOS
En esta casa hirieron a don Rommel.
Este medio le hizo una publicación en vida, por su trabajo.
Rommel hijo siempre estará agradecido de la educación que le dio su padre.
Foto: E. BARRIOS/ R. BARRIOS
En esta casa hirieron a don Rommel.
Este medio le hizo una publicación en vida, por su trabajo.
Rommel hijo siempre estará agradecido de la educación que le dio su padre.
Foto: E. BARRIOS/ R. BARRIOS
En esta casa hirieron a don Rommel.
Este medio le hizo una publicación en vida, por su trabajo.
Él resultó herido en Los Andes #1 cuando el pasado martes estaba de visita en una casa y tres delincuentes armados entraron a la vivienda para asesinar a otro hombre.
La mañana del martes, Rommel vio a su padre más radiante que nunca cerca a Pan de Azúcar, en la isleta que divide los carriles en la vía Transístmica. “Mi papá me llamó para decirme que iría a la casa de una persona a ver un juego. La idea no me gustó, pero no quise decirle nada”, dijo el hijo.
Por cosas de la vida, a eso de las 10:30 a.m. recibió una llamada de que su padre había sido herido y se dirigió al hospital, ahí fue cuando el doctor le explicó que el estado de su papá era delicado. Falleció en plena cirugía.
Don Rommel tenía más de 40 años de vivir en Los Andes #1 donde crió a sus ocho hijos hasta convertirlos en profesionales. Aparte que era el orgullo de la familia, pues fue un excelente jugador de ajedrez, lo que hizo que representara a Panamá desde joven en competencias internacionales, además fue profesor en el Instituto América y director de la extinta Digedecom.