
Bolívar Augusto Rodríguez, en el portal de La Casa del Folclor.
ELSA RODR?UEZ
Bolívar Augusto Rodríguez, en el portal de La Casa del Folclor.
ELSA RODR?UEZ
Bolívar Augusto Rodríguez, en el portal de La Casa del Folclor.
ELSA RODR?UEZ
Antes de su partida terrenal quisiera ver culminado uno de sus sueños: La segunda fase de La Casa del Folclor.
Actualmente están construyendo una extensión de la Casa del Folclor, la cual está bastante avanzada.
Bolívar Augusto Rodríguez, en el portal de La Casa del Folclor.
ELSA RODRÍGUEZ
Antes de su partida terrenal quisiera ver culminado uno de sus sueños: La segunda fase de La Casa del Folclor.
Actualmente están construyendo una extensión de la Casa del Folclor, la cual está bastante avanzada.
Bolívar Augusto Rodríguez, en el portal de La Casa del Folclor.
ELSA RODRÍGUEZ
Antes de su partida terrenal quisiera ver culminado uno de sus sueños: La segunda fase de La Casa del Folclor.
Actualmente están construyendo una extensión de la Casa del Folclor, la cual está bastante avanzada.
Bolívar Augusto Rodríguez, en el portal de La Casa del Folclor.
ELSA RODRÍGUEZ
Antes de su partida terrenal quisiera ver culminado uno de sus sueños: La segunda fase de La Casa del Folclor.
Actualmente están construyendo una extensión de la Casa del Folclor, la cual está bastante avanzada.
Bolívar Augusto Rodríguez, en el portal de La Casa del Folclor.
ELSA RODRÍGUEZ
Antes de su partida terrenal quisiera ver culminado uno de sus sueños: La segunda fase de La Casa del Folclor.
Actualmente están construyendo una extensión de la Casa del Folclor, la cual está bastante avanzada.
Ahí, sentado en el portal de su anhelada adquisición folclórica, La Casa del Folclor, desde los años 80, estaba este valioso hombre folclorista que expone hasta por los poros, el amor a su terruño, como el le dijera en una de sus tantas composiciones, “Chitré Tierra Mía”.
A sus 80 años, Bolívar Rodríguez, aún espera hacer muchas cosas por la culminación de la obra que inició hace más de 25 años.
Vivencias y añoranzas
“Cuando era niño, allá por los años de 1930, iba con mi papá a ordeñar, veía esos carreteros que venían con sus salomas procedente de los campos entrado al pueblo de Chitré, con sus cántaros y lata de miel rumbo a los alambique donde se hacía el alcohol, siempre me llamó la atención esa saloma”, dijo Rodríguez.
“Fui encontrando en el folclor una cantidad de valores, como por ejemplo, la manera de hacer negocios. Mi padre hacía carretas y las personas se acercaban a él y le decían, oye mira termíname la carreta que yo te voy a dar un adelanto con unos toretes que vendí, tú me esperas para pagarte la otra plata, decía papá, como no, y sino me pagas en especie. Y así adquirían su carreta”, expuso Rodríguez.
“Esas cosas llenaron mis sentimientos, preocupado siempre por resaltar esas cosas fue que comencé a hacer “La Casa del Folclor”, dijo.
Para Rodríguez, el hombre del campo que lleva la comida a los mercados, el apoyo que existía entre los lugareños, aquella manera de ayudar al que no tenía incluso con la alimentación, la forma en que se avocaban a realizar sus labores diarias como el ordeño, el transporte en carreta, el hombre que echaba para adelante y levantaron al pueblo chitreano.
Legado y reconocimientos
Rodríguez desea, en la posteridad de su vida, dejar plasmado en La Casa del Folclor todas esas actividades que se fueron dando y que ha contribuido con el crecimiento de Chitré y ser la gran ciudad que hoy es. Desea que se recuerde en el futuro todo aquello que hombres nativos y extranjeros que se establecieron en el lugar hicieron por engrandecer el noble pueblo de Chitré, sostuvo el folclorista.
Pero, Bolívar Rodríguez, es alto reconocido por sus grandes composiciones. “La Paloma Titibú, Canajagua Monte Adentro, Nostalgia Panameña, son entre muchas otras sus máximas exposiciones musicales. Osvaldo Ayala, Minguito Sáez y otros.
Metas a corto plazo
Antes de mi partida quisiera ver culminado mis sueños, La Casa del Folclor y mi Música. Quiero dejar un testimonio de mis pasos a través de los enseres que vamos a dejar plasmados aquí en esta Casa. Yo creo que algún día voy a ver un lugar donde vengan los niños con sus madres a pasar buenos ratos en un parque que vamos a hacer debajo de este árbol de Panamá que hay aquí en el patio”, puntualizó Rodríguez.