El balón sigue manchado, señores. La pasión no se debe llevar más allá de los noventa minutos de juego. El partido de vuelta entre el Liverpool y Juventus se vio opacado por una serie de disturbios horas antes del choque por las semifinales de la Copa de Campeones de la UEFA.
INGLES VISTO, INGLéS MUERTO
Según informaciones dadas por la policía, un grupo de aficionados del Liverpool se encontraba en un local del centro de Turín, cuando entraron en el mismo varios seguidores del Juventus, quienes llevaban bastones y bates. Los seguidores juventinos formaban parte de un grupo más numeroso –integrado también por mujeres- que, según los agentes del orden, estaban en el centro a "la caza" de aficionados ingleses.
De este grupo, seis cubiertos con bufandas juventinas entraron en el pub, tirando el mobiliario y agrediendo a tres ingleses que estaban sentados tomando una cerveza. Uno de los ingleses recibió un golpe con un bate en la cabeza que le produjo una contusión.
EN EL ESTADIO
Si afuera del estadio llovía, adentro no escampaba y algunos seguidores juventinos intentaron tirar la valla de separación y entrar en la zona ocupada por los ingleses, lo que trajo consigo nuevas actuaciones de las fuerzas del orden.
ARRESTOS EN FIORENTINA
Dos seguidores del Fiorentina han sido detenidos por la policía, tras haber lanzado una bengala en una estación de servicio cuando se dirigían a Turín para asistir al partido Juventus-Liverpool.
RENCOR
Los ultras de la Juve, durante la semana, habían jurado venganza por los 39 fallecidos en Heysel hace 20 años y han declararon ayer a Turín como coto de caza del inglés.
FUEGO
Tres automóviles, dos de ellos de las fuerzas del orden, fueron quemados.
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