Las tarjetas de crédito antes eran exclusivas de personas con buen salario, pero hoy día casi todos tenemos una. Si éste es su caso y acaba de obtener una, no se preocupe, aquí le diremos la mejor manera de administrar este plastiquito para que no se le acumulen los intereses. Se recomienda seguir un patrón muy estable en este tipo de ahorro, pues a todos nos sucede que de pronto llega un gasto fuerte, lo cargamos todo a la tarjeta de crédito y desequilibramos nuestro presupuesto, además, el error más común es que la mayoría espera a que se acumulen sus adeudos, dan el mínimo a pagar y eso provoca que sus intereses crezcan.

SIGA ESTOS CONSEJOS:

Nunca gaste más de lo que tiene. Intente comprar al contado. Es preferible juntar dinero y comprar al contado, a pagar las altas tasas de interés que se cobran al adquirir un producto a crédito.

Aproveche los artículos que tengan que ver con la temporada, especialmente frutas y verduras.

Si pretende comprar un carro nuevo, hágalo en meses en los que no hay tanto dinero en la economía, preferentemente de septiembre a noviembre, pues en diciembre y enero regularmente registran aumentos de precio por cambios de modelos.

Aproveche las ofertas en ropa y calzado que ofrecen los centros comerciales entre temporadas.

Acuda a las pre-ventas, especialmente las navideñas que se dan entre octubre y noviembre, dispondrá de mayor variedad de artículos, más tiempo para escoger y precios más bajos.

Puede liquidar los gastos cargados a su tarjeta de crédito cuando reciba el décimo, ya que es un dinero extra.

Es un error esperar a tener dinero para salir de compras en festividades importantes, cuando todo está al doble de precio.