Acompañada por el niño malawiano que tiene en proceso de adopción, David Banda y su hija de sangre, Lourdes Madonna, arribó ayer a Malawi en África.
Madonna visitó Malawi a finales del año pasado para recoger a David Banda, de un año, quien se encontraba en un orfanato tras la muerte de su madre.
Ante su visita, se podó la grama del aeropuerto, se pintaron los orfanatos y centros de cuidado con los que ha estado involucrada y se incrementó la seguridad alrededor de la exclusiva casa donde la estrella se quedó el año pasado.
Su visita es para seguir su trabajo con la organización Raising Malawi, que ayuda a los muchos niños que han quedado huérfanos a consecuencia del SIDA. Negó conjeturas de que planea adoptar otro hijo y dijo que se sentía bien en ese pueblo.
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