¡Tragedia! Al menos 32 personas fueron asesinadas ayer en la Universidad Tecnológica de Virginia, en Blacksburg, por un hombre que les disparó en los dormitorios y dos horas más tarde en las aulas, en la peor matanza en un centro estudiantil de Estados Unidos, informaron fuentes locales.

El agresor, según la Policía, era un "hombre asiático" que portaba dos pistolas calibre 9 milímetros, con las que ingresó a las 7: 15 (hora local) al edificio West Ambler Johnston, que funciona como albergue, y dos horas después a la sede de ingeniería Norris Hall, donde volvió a atacar y luego se suicidó, aumentó la cifra de muertos a 33.

Estudiantes describieron que el pistolero iba de un aula a otra abriendo fuego a lo loco. Había sangre por todas partes.

Charles Steger, titular de la universidad, conocida como Virginia Tech, a la que asisten unas 26 mil personas, dijo que lo ocurrido "es una tragedia de proporciones monumentales".

Sebastián Vásquez, un estudiante oriundo de Bolivia, dijo a la cadena CNN que escuchó los disparos, vio "gente llorando" y "a la Policía ingresar con ametralladoras y evacuar" a las personas que estaban en el edificio.

La estudiante mexicana Marcela Uribe manifestó que "el 8 y el 13 de abril hubo dos amenazas de bomba", pero no se sabe aún si esto guarda relación con la matanza.

Éste es el segundo episodio grave de violencia que se registra en menos de un año en el centro estudiantil.

SIN PANAMEñOS

Como en esta universidad hay muchos estudiantes latinos, este medio averiguó en la Embajada de Estados Unidos en Panamá, si entre los heridos o víctimas había algún estudiante panameños, pero esa posibilidad fue descartada.

En agosto de 2006, un prisionero que se fugó de una cárcel cercana ingresó al predio universitario y mató a un policía y a un guardia de seguridad.

En la última década, hubo en Estados Unidos al menos 18 episodios violentos en establecimientos educativos, y uno de los más graves ocurrió en abril de 1999, cuando dos adolescentes con un fusil, dos escopetas y un revólver mataron a 13 personas e hirieron a otras 23 en Columbine (Colorado) y luego se suicidaron.

DESESPERADOS

Algunos fueron hospitalizados tras sufrir lesiones al saltar de los dos primeros pisos del edificio para eludir el ataque.