El calor que se vivió en la ciudad de Aguadulce fue insoportable. En las calles, la gente corría a buscar refugio entre las sombras de los árboles o aleros de los techos.
El sol, según los conocedores, está perpendicular a la tierra; esta posición lo sitúa en el ángulo más cercano durante todo el año, por ende, el calor y los rayos solares son más fuertes y peligrosos.
Julio Rodríguez, médico homeópata, dice que hay que tener mucho cuidado durante este mes, el más caluroso y más húmedo, ya que es cuando se realiza la transición de verano a invierno.
Rodríguez recomienda evitar tener contacto con los rayos solares y usar vestidos frescos y cerrados.
En Aguadulce, según comunican, las temperaturas alcanzaron los 40 centígrados.