Un paso atrás. Una medida cautelar de casa por cárcel no fue razón suficiente para que David Suazo le diera rienda suelta a su ira y, presuntamente, disparara en contra de su padrastro Víctor Fung, por agredir a su madre, lo que provocó un retroceso en la rehabilitación emocional y espiritual que él mismo había prometido realizar.

Víctor, de 18 años, fue uno de los sobrevivientes del incendio registrado el pasado 9 de enero en el Centro de Cumplimiento de Menores en Tocumen. Este, al ver a su madre sometida por la actitud agresiva de su padrastro, reaccionó violentamente y arremetió contra él, haciéndole los supuestos disparos.

Según moradores del área, que no salen del asombro por lo ocurrido, al verse acorralado, Fung tomó su vehículo tipo taxi para buscar ayuda policial. El auto tenía siete orificios de bala.

SU MADRE NEGO TODO

Por su parte, María Suazo, madre de David, entre sollozos negó lo acontecido, y aseguró que su hijo nunca disparó contra Fung, pues solo intentó librarla de un hombre que hace tiempo la amenaza escribiéndole insultos en la pared de su casa y "atormentando mi vida todos los días".

PUEDE VOLVER A PRISION

De confirmar la Fiscalía que Suazo fue quien disparó contra su padrastro, a pesar de las quemaduras que tiene en todo su cuerpo, la medida cautelar otorgada puede ser revocada y él podría volver nuevamente al Centro de Cumplimiento para terminar su condena (le faltaba cerca de año y medio). El arma con que dispararon no ha sido encontrada.

NECESITA ATENCION

Ante lo ocurrido con Suazo, la psicóloga Rose Mary Reyes expresó que cualquier individuo que esté sometido a un hecho traumático tiene secuelas dentro de su campo emocional, reaccionando con dos actitudes: una es la ira, que ocasiona que la persona cometa locuras, o la de no reacción, que por más hechos que un ser humano vea, no responde.

La experta explicó que este joven tiene dos problemas: el primero es su conducta rebelde, que lo llevó antes a prisión, y el otro es el hecho de estar cerca de la muerte. Lo más recomendable es que este tipo de personas reciban terapias pronto, si no, llegará a un punto en el que no se podrá manejar.

SE FORMO

Se presume que la disputa se dio por un 'triángulo amoroso', que terminó a puños en una subestación policial.