Esperanza de vida


Cerrar!

El pequeño Anthony González es el primer niño de cristal que recibe el tratamiento en el país.

Fotos: ROBERTO BARRIOS

  • Esperanza de vida

    El pequeño Anthony González es el primer niño de cristal que recibe el tratamiento en el país.

    Fotos: ROBERTO BARRIOS

  • Esperanza de vida

    La familia González está feliz.

  • Esperanza de vida

    Un cuarto fue habilitado para los niños.

  • Esperanza de vida

    El pequeño Anthony González es el primer niño de cristal que recibe el tratamiento en el país.

    Fotos: ROBERTO BARRIOS

  • Esperanza de vida

    La familia González está feliz.

  • Esperanza de vida

    Un cuarto fue habilitado para los niños.

  • Esperanza de vida

    El pequeño Anthony González es el primer niño de cristal que recibe el tratamiento en el país.

    Fotos: ROBERTO BARRIOS

  • Esperanza de vida

    La familia González está feliz.

  • Esperanza de vida

    Un cuarto fue habilitado para los niños.

  • Esperanza de vida

    El pequeño Anthony González es el primer niño de cristal que recibe el tratamiento en el país.

    Fotos: ROBERTO BARRIOS

  • Esperanza de vida

    La familia González está feliz.

  • Esperanza de vida

    Un cuarto fue habilitado para los niños.

  • Esperanza de vida

    El pequeño Anthony González es el primer niño de cristal que recibe el tratamiento en el país.

    Fotos: ROBERTO BARRIOS

  • Esperanza de vida

    La familia González está feliz.

  • Esperanza de vida

    Un cuarto fue habilitado para los niños.

Quintín Moreno - DIAaDIA

La felicidad se sentía en un cuarto del hospital San Miguel Arcángel antier, pues Anthony González, de cuatro años, se convirtió en el primer niño de cristal que recibe su tratamiento intravenoso en Panamá. Sus padres, Adalberto González y Daysi de González, sienten alivio, porque su pequeño podrá tener una mejor calidad de vida.

Un gran sacrificio resultaba para los padres de los niños de cristal en Panamá aplicarles su medicación, pues viajaban cada tres meses a República Dominicana a recibir el tratamiento para fortalecer sus huesos, en el que se invertían tres mil dólares por pequeño, pero llegó el momento en que ya no tenían dinero para viajar.

Renán Araúz, cirujano ortopeda y traumatólogo del HSMA, manifestó que con la aplicación desde tempranas edades del medicamento pamidronato disódico a los niños de cristal, estos tienen menos probabilidades de sufrir quebraduras en sus huesos, lo que mejora su calidad de vida.

Niños de cristal son los que padecen la Osteogénesis Imperfecta (OI), un trastorno genético que se caracteriza por la fragilidad de los huesos, que pueden fracturarse ante el mínimo golpe o incluso sin causa aparente.

Dayana de Núñez, presidenta de la Fundación Niños de Cristal, recuerda que desde el 2007 están luchando para que se aplique el tratamiento en Panamá; esto por fin se ha logrado, lo que marca un hecho histórico en la salud del país.

 
suscripciones