Un final injusto. Así se puede calificar la forma en que murió un señor de 70 años en la madrugada de ayer.

Se trata de Francisco Arturo Estronkui, un señor que falleció, presuntamente, por la inhalación excesiva de humo mientras dormía en su casa.

Esto se dio luego de que se incendiara el cuarto 3, de la casa 2466, de calle 5, Río Abajo, donde vivía Francisco con su hijo.

Los mismos vecinos del sector trataron de salvar a Estronkui, tirando cubos de agua, pero los esfuerzos fueron en vano.

El señor no murió calcinado gracias a la acción de los vecinos y de los "camisas rojas" del Cuerpo de Bomberos de Panamá.

Los enseres y demás pertenencias del cuarto quedaron en cenizas y fue pérdida total. Luego del fuego, cuando ya la situación estaba controlada, llegó el hijo de Francisco, quien no estaba en casa al momento del siniestro. El joven lloraba la pérdida de quien, además de su padre, fue su compañero y amigo.