La escuela Porfirio Meléndez, en Colón, paralizó sus clases por falta de agua; además del deterioro de bancas y de las instalaciones.
La docente Isa de Guzmán denunció que como educadores tomaron la decisión de devolver los niños a casa, porque es irresponsable atenderlos. Indicó que a los sanitarios no llega el agua, lo que hace imposible que se utilicen.
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