En un ambiente de alegría y en medio de la euforia del triunfo el equipo de Herrera, campeón del béisbol mayor y dueño de la "Copa Jackie Cardoze", fue recibido con honores por la fanaticada de esta provincia, que con consignas, pancartas y banderas se vistieron de azul y amarillo.

Y es que el entusiasmo cubrió la ciudad de Chitré y los distritos vecinos, que desde tempranas horas se preparaban para hacer la calle de honor a los campeones desde Divisa hasta el estadio Rico Cedeño. "Todos los caminos llevan a Divisa", gritaban en los carros los fanáticos que, cargados de emoción, fueron a guardar su espacio en la caravana de recibimiento, mientras que otros decidieron trasladarse hacia la ciudad capital para custodiar a los campeones hasta su patria chica.

Los negocios, las instituciones públicas y demás negocios disminuyeron sus horarios de trabajo ante el suceso que mantuvo pendiente a todos los fanáticos durante la Serie Final.

Los campeones entraron a la ciudad de Chitré, donde está ubicado el estadio Rico Cedeño, por la avenida principal en señal de honor y luego recorrieron la ciudad por la avenida Pérez hasta Monagrillo, tierra de las "Brujas de Herrera" que, como es ya tradicional, les dan la suerte al equipo durante esta importante jornada deportiva.

Luego, por la avenida Herrera, siguiendo por el parque Unión hasta el estadio Rico Cedeño, los peloteros fueron agasajados por su gente, que en una algarabía manifiesta decían: "Allí, allí está el campeón".