La noticia del pago de unos B/.28.9 millones de dólares, que fueron cobrados por las empresas eléctricas en Panamá por exceso a la cantidad que se les autorizó recibir en el periodo de julio de 2002 a junio de 2006, cayó como balde de agua fría para los chiricanos, que no aguantan los constantes aumentos y el alto costo de la vida en estos momentos.

No obstante, la mayoría de ciudadanos consultados sobre el tema, opina que estas empresas deberían devolver el dinero a los clientes afectados en una sola cuota, y no en ocho como se está indicando, porque dicen que no hay que tener contemplación con estas empresas, pues ellos no la tienen con los pobres.