"Yo volví a nacer"

En el corazón del comunicador reina el amor y la paz de Dios hace un par de años. “Mis sentimientos hacia el mandatario son de perdón, respeto y amor, y lo que sucedió es parte de los gajes del oficio en el ejercicio del periodismo”, expresó muy sereno.

A pesar de lo bochornoso de la situación, el periodista manifestó que desde que Cristo entró a su vida, realizó un cambio para bien, de ahí su serenidad a la hora de manejar dicha circunstancia.

No quiere especular

Al consultarle cómo hubiese sido su reacción en otros momentos de su vida, muy convencido dijo que no quería especular. “La situación, tal vez, hubiera sido diferente”.

Pasado pisado

No es un secreto que Famanía pasó por situaciones que algunos jamás superan, por eso dice sentirse en paz y no se avergüenza de lo que ha tenido que pasar, ya que por medio de esto “Cristo entró en mi vida, todo cambió y yo volví a nacer“.

En sí, él no sabe si todo lo que pasó en el pasado fue necesario, pero lo que sí sabe es que ahora puede entender mejor el idioma de las personas que pasan por situaciones difíciles o similares a las de él y sabe que ahora cuenta con las herramientas para ayudar y brindar una mano y palabras de aliento a quienes la necesitan.

Trabaja con la palabra

Los planes de Dios son perfecto y es que después de este incidente muchas personas lo han llamado para mostrarles su apoyo y a la vez solicitar su ayuda, por lo que ha visto esto como positivo y entre sus planes es seguir trabajando con el Ministerio Pan y Pan, de la iglesia “Hay Esperanza”, donde llevan alimentos y palabras de Dios a personas de la calle.

Otra bendición que Hugo obtuvo de esto, aunque muchos no lo vean así, es que sirvió para que los lazos de comunicación con una de sus hermanas se volvieran más fuertes. “Por esto volví a conversar con mi hermana con quien tenía los lazos de comunicación roto”. Qué bien!

Por último, el periodista solicita a las personas que miren al presidente como el ser humano que es. Así como nosotros tenemos problemas personales, familiares y laborales, imagínense el peso que debe cargar el mandatario. “Ese día demostró que esa carga es muy grande y el dique de contención se rompió”. concluyó.