Dios sabe que has pasado momentos de gran tristeza, que has perdido las ilusiones, que mucha gente te ha decepcionado y que inclusive has pensado hacer cosas que al Señor no le agrada, a raíz de la gran decepción que te inunda.

Dios entiende tu desánimo, tu dolor y tu frustración, es por ello que quiere que sepas que Él está en cada circunstancia de tu vida y que su especialidad es curar corazones heridos. Dios es más que suficiente para todo.

A partir de hoy, el consuelo y la caricia del amor en Dios llegarán a tu vida en todos tus momentos, sean buenos o malos, te provoquen risa o te hagan llorar.

Abre los ojos del alma y llénate de entusiasmo, Dios te permitió despertar un día más, para que contemples todas las maravillas que Él creó para ti.

Olvídate de los remordimientos, de los sentimientos de culpa, de los sufrimientos pasados y futuros, y de tus miedos.

Despierta y busca la felicidad en Dios, la vida que te dio es como el maná, para que la vivas con intensidad cada día.

No te desanimes, Dios quiere curar tu corazón herido porque te ama, Él se manifiesta en tu vida en la naturaleza, te envía flores cada primavera y un hermoso amanecer cada mañana.

Háblale hoy a Dios con corazón sincero, cuéntele tus tristezas y decepciones, Él siempre escucha y desde cualquier punto del Universo guarda y protege tu vida.

Si te pones en Sus manos, te guiará, te cargará cuando necesites hacer más liviano el peso de tu cruz, y te dará sabiduría y fortaleza para enfrentar cualquier circunstancia que la vida te depare. ¡Nunca lo dudes!