Antes de empezar a trabajar, le echa maíz a las palomitas. Esta es la bendición que recibe la señora Lorena Cervantes, quien vende bolsitas de maíz en la Peatonal.

Ella es capitalina y comenzó en estas lides hace 4 años por medio de su tío que vendía maíz, pero, al fallecer éste, ella quedó con el negocio.

Vender maíz a las personas que les gusta alimentar a las palomas de la Peatonal, es su fuente de trabajo. Tiene buena clientela, en su mayoría niños que piden a sus padres tener maíz en la mano para tirarle a estas aves.

Gracias a Dios y a sus clientes, le va bien. Lo que gana le alcanza para el sustento diario. No es mucho, pero sí algo significativo y honrado.

Su trabajo es un poco cansón, pero ya está acostumbrada. Labora desde las 9 de la mañana hasta las 5 de la tarde, todos los días.

Afirma que echarle maíz a las palomas es algo atractivo y divertido para los niños y adultos que caminan a diario por esta avenida.

Para atraer a sus clientes, procura siempre darles un buen trato, sobre todo, a los niños.

BUENA VENTA

Por día compra 20 libras de maíz, que vende en bolsitas de 25 centavos.