Si les gustan las películas llenas de romanticismo, les tenemos las mejores opciones, porque los harán reír y suspirar.
AL DIABLO CON EL AMOR
Genevive (Nia Vardalos) es una exitosa florista quien está decidida a no pasar más de la quinta cita con ningún hombre, pues piensa que más allá de esto, el romance se acaba.
Greg (John Corbett) es el dueño de un restaurante exitoso y encantador, pero difícil de enamorar. Cuando conoce la manera de pensar de Genevive, Greg decide retarla.
Luego de siete años, las dos estrellas de "Casarse Está En Griego" regresan en esta divertida comedia romántica. ¡Qué bien!
PROPUESTA DE AñO BISIESTO
Anna (Amy Adams) hará todo lo posible por llegar a Dublín el 29 de febrero, ¿la razón?, la chica que aprovechará el último año bisiesto para pedirle a su novio que se case con ella, siguiendo así una tradición irlandesa. Para ella, "es ahora o nunca".
Ella espera con ansias la llegada del 29 de febrero, pero el mal tiempo rompe todos sus planes de llegar hasta Dublín, lo que ella no entiende es que durante todo el camino hay señales de que su destino es otro.
Tan testaruda es ella, que sin importar si tiene que cruzar el mismo infierno para llegar a donde su prometido, se dirige a toda prisa a su destino.
En el camino, conocerá a un apuesto lugareño que se ofrece a ayudarla a cruzar el país por rutas secundarias. Anna acepta la proposición sin sospechar que está a punto de enamorarse de él. ¡Mmm!
¿Y DONDE ESTAN LOS MORGAN?
Meryl (Sarah Jessica Parker) y Paul (Hugh Grant) Morgan son una exitosa pareja de Manhattan cuyas "casi" perfectas vidas tienen un pequeño fracaso, pues se están divorciando. Pero la locura de su vida romántica no puede ser comparada con lo que van a vivir; ellos son testigos de un asesinato y se convierten en blancos de un asesino a sueldo. El FBI, para protegerlos en su calidad de testigos, decide trasladar a los Morgan desde su amada Nueva York a un pequeño pueblo en Wyoming.
Esta relación frágil está amenazada con terminar, así como sus vidas sin Blackberries en las montañas rocallosas, a menos que los Morgan puedan tomarlo con calma y volver a encender su pasión. ¡Uff!