“Alex”, como le llamaban, hacía tres meses que regresó de Estados Unidos. Según testigos, una bala “loca” dirigida a otros sujetos fue la que accidentalmente le quitó la vida.
Aseguraron que era un joven agradable, educado y con deseos de superación, y que trabajaba en el Grupo Unidos por el Canal.
Esa misma noche, pero en el Centro de Rehabilitación Nueva Esperanza en Colón, los primos Ariel y Julio César De La Espada fueron asesinados en un tiroteo en el que otros tres reclusos también fueron heridos.
Cristóbal Góndola, director del centro, dijo que mantienen al supuesto responsable, además de cuatro armas de fuego.
Mientras que en la provincia de Chiriquí fue hallado a la orilla de la carretera en la comunidad de Almendro Centro, en el distrito de Barú, el cadáver de Leopoldo Jiménez, de 35 años, quien tenía heridas con objeto contundente en la frente y en el brazo izquierdo, presuntamente hechas con una pala.