Benedicto XVI recorrió la plaza de San Pedro, entre la gente, a bordo de un automóvil descubierto, una vez concluida la misa solemne de inicio del Pontificado.

En medio de un verdadero baño de multitudes, donde le aclamaron y aplaudieron sin cesar, también se efectuó la imposición del Palio y entrega del Anillo. El ritual de la misa incluye el rito de la obediencia, que hasta ahora contemplaba que los cardenales se arrodillaran ante el Papa, pero que, en esta ocasión, lo hacen doce personas en recuerdo del número de los Apóstoles.

ANECDOTA

Tres presidentes de Colombia querían saludar al Pontífice tras la ceremonia, reveló el propio gobernante colombiano, Álvaro Uribe.

"Cuando fui a pasar el filtro para saludar a Su Santidad me dijeron: ’pero si aquí ya pasó adelante el Presidente de Colombia a saludar’.

Añadió a los celosos guardias: "no, vea, me da pena, déjeme pasar que yo soy el Presidente de Colombia". Pero pasó una tercera persona que también dijo ser presidente.

MISAS

Las parroquias del mundo se unieron a la celebración con misas para que el Espíritu Santo lo ilumine.