La pasión que levanta el béisbol nacional va más allá de las fronteras de provincias. Hay equipos nacionales que tienen fanáticos en cada esquina. El apoyo es incondicional.
Las noches en el Estadio Nacional Rod Carew siempre son apacibles y confortables para los fanáticos.
El partido entre Los Santos y Panamá Oeste era el platillo fuerte de esa noche. Las graderías del estadio estaban revestidas de naranja, color típico de los seguidores de la tropa santeña.
Adultos y niños vestían con mucho entusiasmo los colores de Los Santos. Un momento... ¿por qué tantas personas le van a Los Santos? ¿Será que los fanáticos se mueven con su equipo o es que tienen seguidores en cada provincia? Estas interrogantes llevaron a respuestas bastante peculiares.
El ejemplo primordial es la señora Sonia. Ella es chiricana, pero le va a Bocas. "Yo he vivido toda mi vida en 'Bocas', aunque nací en Chiriquí, mi corazón es tortuguero", comentó muy entusiasmada.
Así como Sonia, las cosas se repiten en Chiriquí. Para emparejar las cargas y no salir del sexo fuerte, DIAaDIA conversó con Amarilis. Cariñosamente conocida con el apodo de "Yiyi", esta mujer nacida en la provincia de Coclé está casada con un chiricano, vive en la ciudad capital, y cuando puede va al estadio para apoyar a la tropa de El Valle de la Luna.
"Soy de Coclé, mi familia, la mayoría, es de la ciudad de Aguadulce. Me la paso más allá, pero para no pelear con mi esposo, apoyo a Chiriquí en el béisbol mayor y juvenil", explicó con una sonrisa en su rostro.
Amarilis agregó que Chiriquí es su equipo favorito, pero no le pierde la pisada a Coclé ni a Panamá Metro.
UN DATO CURIOSO
Otro fenómeno del béisbol son las personas que tienen algún familiar en las nóminas de los equipos.
Este es el caso de Anayansi Serrano, quien es chiricana y tiene a un hijo jugando para la provincia de Bocas del Toro.
"Yo soy chiricana de pura cepa, pero mi hijo juega para Bocas, por eso lo apoyo. Espero que los chiricanos me comprendan", comentó.
Cabe mencionar que Anayansi vive en la ciudad capital, es chiricana, pero apoya a la tropa bocatoreña.
Pero no solo las chicas tienen esta tendencia de tener en su corazón equipos que no son los de su provincia.
DIAaDIA pudo conversar con Héctor Corrales Moreno, quien es nacido en la provincia de Herrera, pero apoya a Los Santos. La razón es que la tropa herrerana quedó eliminada y por afinidad familiar le da todo su apoyo al otro equipo de la región de Azuero.
"Soy de madre herrerana y de padre santeño, por eso sigo a Los Santos y a Herrera", dijo.
LA TRADICION JUEGA UN PAPEL VITAL
Los adultos marcan la pauta en apoyar a los equipos que no son de su provincia, pero la tradición también juega un papel importante.
David Jaramillo, un pequeño de 9 años de edad, ama al béisbol y su pasión es ir al estadio.
Aunque sus padres son de la ciudad capital, David apoya a Los Santos, porque su abuelo lo lleva al coliseo a ver los juegos de este equipo.
"Me gusta cómo juega Los Santos. Siempre voy a apoyar a la tropa santeña", dijo.
El pequeñín agregó que también practica el béisbol y quiere jugar para Los Santos.
De seguro no es casualidad que se vean fanáticos de una provincia apoyando a otra. Porque en el mismo campo de juego, los jugadores defienden una camiseta que no representa su provincia natal o donde se criaron. En el diamante, chiricanos juegan para Bocas del Toro, Panamá Oeste o Panamá Metro. Santeños militando en Herrera y viceversa; en las gradas, el fenómeno se repite una y otra vez.
No hay duda de que ir al estadio es una experiencia familiar. Las familias se juntan para celebrar, las provincias se hermanan y todo esto para que gane el rey de los deportes en Panamá, el béisbol.
Los fanáticos apoyan a su equipo a lo largo de todo el país.