El Gobierno marroquí anunció la creación de una comisión ministerial para investigar las posibles irregularidades administrativas y jurídicas que pudieron provocar la muerte de 55 obreros en un incendio que se desencadenó en una fábrica de Casablanca.
Se informó que "la gravedad del incendio se debió a la ausencia de medidas de seguridad”.