Una mujer fue a comprar un queso blanco a un supermercado y cuando llegó a su casa, al partirlo encontró una lagartija.
Según la afectada, ella abrió el queso en la mañana y solo partió un pequeño pedazo que se comió su nieta, pero al continuar cortándolo encontró al animal muerto, lo que considera es realmente insalubre.
Magalis Bullen, encargada del departamento de Protección de Alimentos en Coclé, dijo que se recibió la denuncia de un queso abierto, en el que hay un cuerpo extraño, por lo que se iniciará la investigación.