Detenga la formación de depósitos de grasa en el abdomen con ejercicios sencillos.
Disminuya el consumo de grasas saturadas contenidas en alimentos como carnes grasosas, cremas y mantecas. Es ideal caminar, andar en bicicleta, subir escaleras, hacer gimnasia, agregar pequeñas pesas o hacer un deporte apropiado a las posibilidades de cada uno. Reparta las comidas a lo largo del día. Es conveniente consumir el 60% de las calorías diarias en el transcurso del día, en vez de hacerlo por la noche, en la cena. Mantenga el abdomen adentro. Además de mejorar su aspecto, fortalecerá los músculos.
Tenga en cuenta que cualquier tipo de panza, sea blanda o dura, tiende a elevar el nivel de colesterol y aumenta las posibilidades de sufrir problemas cardíacos.
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