María Reina de los Ángeles, monja del Albergue de María en Colón, que cuida a los enfermos con SIDA, recibió la visita de dos delincuentes que la amenazaron por espacio de 20 minutos para que les entregara la llave donde depositan las ofrendas de la capilla.

La monja narró que vivió los peores minutos de su vida porque uno de los sujetos, que nunca se sacó la mano del bolsillo, decía que si se resistía le disparaba y que no le importaba nada.

La religiosa dijo que se podía percibir que era un menor de no más de 15 años, pero con una alta experiencia delictiva; pero, afortunadamente, después de ella recorrer el albergue con el sujeto, éste corrió porque escuchó que había otras personas en el lugar.

La hermana Lucía del Amor Hermoso, manifestó que las familias tienen que unirse más porque los jóvenes están violentos y necesitan la orientación: "esto es algo terrible que está pasando en Colón. Nosotros no tenemos dinero y nos asaltan".

Dijeron que no es la primera vez que asaltan en el albergue y piden más ayuda para no ser víctimas de los malhechores.