"Parecía que la tierra se estuviera abriendo", dijo Ana, una de las funcionarias de la Autoridad Marítima de Panamá, que presenció cuando las baldosas de su oficina se levantaban.
El pánico se apoderó de los empleados de la oficina de la AMP, ubicada en calle 50. Fue entonces cuando el seguridad del edificio evacuó los tres primeros pisos.
Los pasillos se hicieron más estrechos de lo normal, por la cantidad de personas que corrían hacia la única salida que hay en el edificio, pues el inmueble no cuenta con una salida de emergencia.
Las personas, la mayoría asustadas, encontraron refugio en los estacionamientos de la Iglesia de Guadalupe, ubicada en calle 50; y ahí se mantuvieron por varias horas, e incluso algunas optaron por almorzar debajo de los árboles.
Una hora después, fue cuando las unidades del Cuerpo de Bomberos de Panamá llegaron al lugar para inspeccionarlo, pero no encontraron ningún indicio de que el edificio esté colapsando. Además, descartaron que se haya dado un movimiento telúrico, como manifestaron algunas personas.
El cabo Carlos Afú, de los Bomberos, manifestó que el calor pudo ser la causa del levantamiento de las baldosas, por lo que las personas no deben sentir temor.
"Esta no es la primera vez que se da esta situación aquí, el año pasado pasó lo mismo", dijo la señora Emita de Méndez.
El año pasado, el calor y la humedad también fueron las causas de la rajadura del piso.
DAñOS
Una oficina fue afectada en su totalidad, además del piso del pasillo, que ya mostraba señas de querer levantarse.
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