Qué tal, no te voy a decir mi nombre, porque de la persona que te voy a escribir siempre lee tu columna. Se trata de mi mejor amiga, a quien he amado en secreto toda mi vida y no me atrevo a decir nada.

Ay, Moza, esa mujer es una diosa y creo que por eso jamás me haría caso, además, para ella soy sólo su amigo, su paño de lágrimas, pues siempre termina desahogándose en mi hombro cada vez que le rompen el corazón.

En estos días me he sentido tan impotente, que estuve a punto de confesarle lo que siento, pero justo cuando lo iba a decir, llegó mi hermana y me interrumpió.

Yo te escribo porque quiero que me des un consejo. Deseo que me digas si debo decirle lo que siento o seguir callando. A veces creo que es mejor que no sepa, pero hace días pienso que no. Creo que si le digo lo que siento jamás seguiré sufriendo, porque no me contará más sus andanzas.

No sé si exista una posibilidad para mí, pero de todas formas no creo estar dispuesto a seguir sufriendo de esta manera, aunque sea por mi culpa, por callar. No sé qué opines tú, deseo que me ayudes a tomar la decisión. Hasta pronto

bbSé sincero

Hola, lo que te está pasando es un dilema muy difícil, pero creo que tienes razón en lo que dices, eres tú quien tiene la solución.

Te digo esto, porque eres tú quien la ama y eres quien le presta tu hombro para que se consuele. Me parece que ya es hora de que tomes una decisión, déjame decirte que ella no tiene la culpa de lo que pasa, piensa que cuando uno quiere a alguien como un amigo no puede sentir otra cosa, y cuando se acostumbra a que éste le consuele es peor.

Creo que si le vas a decir la verdad, debes hacerlo con cautela porque, de lo contrario, perderás su amistad para siempre y la mujer de tu vida.

La decisión que tomes le dará un giro a tu vida, así que piensa bien las cosas: la sigues escuchando o le dices la verdad de tus sentimientos. ¡Suerte!