La mayoría de los periódicos del mundo publicaron ayer la controversia sobre si el Príncipe Harry debe ir o no a la guerra de Irak. Pero eso no quedó allí, ya que algunos medios se fueron más allá y revelaron algunas cocoas. El Sunday Times informó que los insurgentes iraquíes ya están esperando con ansias la llegada del príncipe Enrique.

Por su parte, The Guardian habla de los difíciles días que debe de estar pasando Isabel II, aunque insiste en que "si la monarquía británica todavía significa algo, el príncipe Enrique deberá ir a Irak por su propio bien".

Por su parte, News of the World cuenta que el príncipe Enrique, acompañado de su novia Chelsy Davy y de su hermano y otros amigos, celebraron el fin de semana una fiesta de despedida, la que aprovechó para dar un discurso. "Estoy hecho un manojo de nervios".

Por otra parte, el News of the World añade que el príncipe hizo su testamento, por si acaso ocurriera una desgracia en Irak. El príncipe dispone de una fortuna de unos 20 millones de euros.