Se quedó solo y con los zapatos puestos. A Ricardo Martinelli lo acompañó un grupo minúsculo de simpatizantes en la avenida 4 de Julio, desde muy temprano en la mañana de ayer. Martinelli se notaba molesto. Al parecer, no hubo organización por parte de los miembros de su partido. La llegada algo tarde de sus simpatizantes, impidió que Martinelli se quedara por mucho tiempo en el lugar. De igual forma señaló que estaba allí sin guardaespaldas y sin nada, porque detesta andar con manzanillos que no permiten que el pueblo se acerque. Señaló que los políticos andan en otro mundo, y no palpan la realidad del pueblo panameño.