Desde hace un año, la población de Los Uveros en el distrito de Capira consume agua sin clorar, proveniente de un acueducto que data de hace 23 años.

Víctor Tamayo, encargado de administrar el acueducto, aseguró que hace un año, se agotó la provisión de cloro y aunque acudieron al Centro de Salud de El Espino en donde se abastecían del producto, les informaron que "no había".

Explicó que el costo del cloro supera los B/.180.00, demasiado elevado para ser adquirido por la comunidad, la cual vive de la agricultura de subsistencia.

Mencionó que meses atrás, los funcionarios de salud prometieron entregarles pastillas para clorar el agua en el tanque de reserva, pero esta promesa no se cumplió.

Cada mes el tanque de almacenamiento de agua es lavado para evitar mayores enfermedades entre la población, en tanto que los daños en las tuberías son reparados tan sólo con una segueta y recortes de tubería que sobraron al construirse el acueducto.

Este acueducto abastece a unas 18 casas, aunque también suministró agua durante la temporada de verano al poblado vecino de Chagres, perteneciente a Colón.

Según Tamayo, se ha recomendado a las familias que apliquen una gota de cloro al agua que consumirán, aunque dijo no tener la certeza de que las familias cumplan con esta solicitud.

Dijo haber solicitado apoyo a la Autoridad de Canal de Panamá (ACP) para que ayudara en la construcción de un nuevo acueducto, pero aun no han tenido una respuesta.