"Mi padre no murió ayer, él ya estaba muerto desde el 31 de enero de 2001 cuando murió mi madre, eso lo mató y su cuerpo viví­a, pero él ya no", expresó en la capilla de Penonomé, con la voz entrecortada y entre lágrimas, la hija mayor del historiador y escritor Jorge Conte Porras, Davaiba Conte.

En un acto í­ntimo, pero significativo, en la capilla de San Antonio en Penonomé, se realizaron las honras fúnebres del historiador Jorge Conte Porras, quien fue enterrado en el cementerio penonomeño, tal y como lo habí­a pedido antes de morir.

A las 9: 00 a.m., se inició la misa oficiada por el sacerdote Saúl Estrada. No hubo gran cantidad de personas, sólo familiares y allegados a la familia.

Davaiba Conte, hija mayor del historiador, expresó de manera emotiva que el corazón de su padre sí­ latí­a, pero él ya estaba muerto y esto les afectaba a ellos, porque fue un excelente padre, abuelo ejemplar y, sobre todo, un hombre que nunca dejó de enseñar con respeto y dignidad. "Sé que es inevitable que la gente hable de él para bien o para mal, pero tengo que decir que es un ejemplo de persona", concluyó.

APLAUSOS

En medio de aplausos, fue sacado el cuerpo del historiador. La familia estaba incómoda por la presencia de los medios de comunicación.