Laborando en la desidia. Con moscas y cucarachas se enfrentan diariamente los más de 60 conductores que trabajan en la piquera de taxis El Crisol, en San Miguelito.
Los malos olores que emanan de los depósitos de basura, localizados en la parte trasera de la piquera y aguas negras con desechos fecales provenientes del sector 1 de La Pulida, mantiene pendiendo de un hilo la salud de los propios automovilistas.
"Varios compañeros se han enfermado del estómago porque no toleran la pestilencia de la alcantarilla, sobre todo cuando llueve", explicó un conductor que asegura tener más de tres años con este problema.
Norman De Gracia, representante del sector, indicó a DIAaDIA que la construcción del desagüe entrará en el próximo presupuesto destinado al corregimiento y aseguró que semanalmente se recoge la basura del lugar.
SANCIONES
Según los conductores, los residentes de las barriadas cercanas depositan sus desechos en el basurero.
|