Con la llegada del invierno, muchas son las cosas a las que hay que prestarle atención. El vestuario, las enfermedades y, por supuesto, el cabello. Para cuidarse el cabello, lea lo siguiente.
Para ese cabello quebradizo, seco y encrespado causado por los cambios bruscos de temperaturas, se recomienda aplicar semanalmente un acondicionador hidratante y utilizar cepillos de cerdas naturales en vez de plásticas. Para esa melena apagada y sin brillo, debido a la lluvia y la alta humedad del aire asociada a la falta de sol, es necesario secar el pelo a una temperatura baja, restringir el uso de rizadores y planchas de alisado y utilizar productos de fijación que realcen el brillo del cabello. En cuanto al cabello sin volumen, lávelo con champú purificante para quitar el exceso de suciedad y aplíquele una protección acondicionadora intensa.
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