El segundo día de la antorcha olímpica en su recorrido por la China continental estuvo marcado por la ausencia de incidentes y las fuertes medidas de seguridad adoptadas a su paso, que incluyeron modificaciones de última hora en su trayecto.
Un total de 1.680 policías, distribuidos uno cada 20 metros, custodiaron el paso de la llama por la tropical provincia insular.