En estos momentos, el panameño recibe el apoyo de los Yanquis de Nueva York tras romperse los ligamentos cruzados de la pierna derecha, así como el menisco de la misma extremidad.
Las dudas de la continuidad de Mariano con los Bombarderos radica en que a los mulos no les tembló el pulso a la hora de deshacerse de piezas importantes como Bernie Williams o Jorge Posada, quienes eran figuras veteranas, pero estaban saludables, por lo que vale preguntarse si los Yanquis estarán dispuestos en contratar al chorrerano a quien se le vence su contrato de 30 millones de dólares y dos años al final de la presente temporada
Seguramente, cuando Mariano anuncie su regreso y quiera negociar un contrato a los Yanquis, estos se olvidarán de los anillos de Series Mundiales que ganó esta entidad y de los 608 rescates con el uniforme a rayas. Sus frías miradas solo verán a un hombre de 43 años que viene de un largo proceso de recuperación, que apuesta por volver con la grandeza de antaño y retirarse como Dios manda.
Opciones
El cuerpo técnico de los “bombarderos”, con la ausencia de su pilar en el bullpen, sale a la búsqueda de un posible reemplazo. Entre los indicados para este puesto está el derecho David Robertson, quien ha cumplido con eficacia el rol de “setup” -relevo corto- antes de la lesión de Rivera.
Si Robertson cumple con las expectativas de ser el cerrador regular, sin duda, podría ser la apuesta del equipo.
Entre los factores que favorecen a Robertson es su brazo joven, es relevista con mejor actuación en los últimos años, posee un contrato modesto y es elegible para arbitraje.
En su carrera tiene marca de 14-6, con una efectividad de 2.86 y con tres partidos salvados.
Orgullo
De no cumplir Robertson con las altas expectativas como taponero, ¿mirarían los Yanquis a Mo? y hay más preguntas: ¿qué tendría que hacer el panameño para firmar un nuevo contrato con los Yanquis? ¿Tendría “Mo” que bajarse su salario para continuar?
En principio y a falta de que se concrete el regreso de Mariano, lo más seguro es que el equipo no le vuelva a ofrecer un contrato de 15 millones de dólares por temporada, no solo por la lesión, sino por su intención manifiesta de retirarse, por lo que no es descabellado pensar que el chorrerano termine como un Yanqui.
Tampoco será un impedimento para que no se plasme una firma, ya que el interés de Rivera por volver al diamante no tiene que ver con el dinero, es más por orgullo y para poder despedirse de sus fanáticos desde el montículo.