Ella es un gran fenómeno del boxeo femenino en Panamá; es una de las atracciones antes, durante y después de la pelea.

Hablamos de la boxeadora Ogleidis Suárez, una bella púgil, que con su sonrisa y su mirada podría competir para un concurso de belleza, pero a la hora que se pone los guantes y suena el campanazo inicial del combate, se convierte en una verdadera fiera.

EN EL BARRIO

Suárez comentó: "Viví en un barrio bastante humilde, tenía que enfrentarme a lo bueno y a lo malo. Tenía que estar decidida a vivir rudamente, sin importarme a quién llevarme por delante".

La boxeadora, proveniente de Venezuela, tiene en la sangre el boxeo, debido a que sus dos hermanos mayores fueron boxeadores.

"Yo era la niña de mi casa, nunca pensé iniciarme en el boxeo , poco a poco me iba al gimnasio con ellos y ya cuando cumplí los 10 años, me decidí a calzarme los guantes", aseguró.

La bella boxeadora siempre recuerda a su primer entrenador Candelario Guzmán, quien fue quien la introdujo en el mundo del deporte.

CARRERA AFICIONADA

Como todo boxeador, su primer paso son las lides aficionadas.

Suárez hizo su carrera aficionada por completa en Venezuela. " Yo fui campeona nacional en aficionado. En el aficionado llegue a hacer 49 peleas y sólo perdí siete. Estuve en cinco campeonatos, conseguí dos subcampeonatos, y así fui evolucionando en el boxeo.

LA FAMILIA

Ningún padre en el mundo quisiera ver a su hijo encerrado en un ring para darse golpes y menos si tienes una hija, que tiene más pinta de modelo que de boxeadora.

"Yo era la niña de mi casa, ninguno quería que yo practicara boxeo porque me veían muy delicada, pero yo decía que si mis hermanos podían yo también podía. Al principio no me querían dar el apoyo, pero cuando ellos vieron que debuté en el aficionado y que lo hice bien, y fui surgiendo poco a poco, me apoyaban más y hasta me acompañaban a las peleas".

MUNDO DE HOMBRES

Es impresionante ver que en las cartillas de boxeo nacional donde ha participado esta chica, la peleadora llama más la atención que los púgiles estelares de la función.

"En realidad, en Panamá me he quedado sorprendida. Me siento en familia, aunque hay siempre pequeños obstáculos, pero uno los solventas rápidamente, pero por por lo demás, me han tratado bastante bien en todas partes donde voy", dijo.

Agregó que ella se ha dado cuenta de que se ha robado las miradas de muchos.

UNA META TRAZADA

Trabaja fuerte en el gimnasio, nunca se detiene y siempre quiere más, pareciera que no se cansa y que en su mente está completar la meta de todo boxeador profesional, ser campeón del mundo.

"Tengo una meta trazada, que no voy descansar hasta llegar a ser campeona del mundo. Yo confió mucho en mí, porque tengo técnica y la gente le gusta cómo boxeo", aseveró.

MODELAJE

De verdad, el cuerpo de esta chica da para más que recibir golpes, en realidad podría ser una gran modelo.

Suárez aseguró: "Por mi mente siempre me ha pasado ser modelo, pero no he tenido la oportunidad de que alguien se presente a ofrecerme la oportunidad, pero algún día llegará la oportunidad y no la voy a desaprovechar", acotó.

MENSAJE

"Ser boxeador no es sólo ponerse los guantes y ya, es tener un gran espíritu y mucha disciplina, porque uno nunca sabe cuándo saldrá la que le dé pelea".