Docentes del Instituto Benigno Jiménez Garay suspendieron clases por la gran cantidad de excremento de aves que hay en el techo del plantel, pese a que el Ministerio de Salud inspeccionó el lugar.
La decisión, según los educadores, es para no afectar a estudiantes y administrativos que han presentado dolores de cabeza.
Marcia Lou, directora del centro educativo, informó que hay una empresa que se dedicará a limpiar el techo, pero requieren 45 días para los trabajos, por lo que solicitó que se agilicen las labores para que no se pierdan más clases.