El luto embarga a la comunidad de Arco Iris, en Finca 6 de Changuinola. Eran las 7: 00 a.m. de ayer cuando del minisúper El Poderoso Nº 6 se empezaron a escuchar detonaciones de "fuegos artificiales".

En medio de este barullo se escucharon gritos de auxilio.

¿Qué pasó? Al parecer, los dueños del local habían almacenado fuegos pirotécnicos cerca de la cocina, lo que indica que ellos vivían en el establecimiento.

Esta situación hizo que los vecinos corrieran con mazos en manos para abrir boquetes en las paredes del comercio y auxiliar a los asiáticos atrapados.

Al tratar de abrir las puertas de hierro no pudieron. Irónicamente, la gran seguridad que había para que no entraran los "amigos de lo ajeno" impidió la salida de los propietarios, razón por la que quedaron calcinados.

Se estima que hubo unas 30 detonaciones que estremecieron las casas de esa cuadra, por eso se estima que a eso se debió al estallido de los tanques de gas que estaban dentro de aquel establecimiento.

Aproximadamente pasó una hora para que el fuego fuera controlado.

DIAaDIA pudo presenciar que al llegar los bomberos se encontraron con la sorpresa de que no había agua en los hidrantes, por lo que se utilizó dos carros bomba para poder combatir las llamas.

Al sofocar el fuego las escenas eran desgarradoras, pues una familia completa y la empleada estaban sin vida.

A eso de las 10: 00 a.m. se hizo el levantamiento de los cadáveres, entre ellos: la joven asiática, Chunhua Jiang, de 23 años; su esposo Hou Hai Sao, de 24 años; la empleada Virginia Quintero Quintero, de 24 años.

Sobre el vientre de la doméstica estaba el cuerpo de un niño de dos años. También se encontró envuelta en una sabanilla a una niña de cinco meses.

Se conoció que Virginia vivía en Guabito y solo tenía tres días de estar laborando con los comerciantes.