Cerca del 75% de la población penitenciaria apoyó el llamado a huelga de hambre, según informes de la Fundación de Apoyo al Detenido.

La huelga se inició a las 6:00 a.m. y acabó a las 2:00 p.m., por lo que ninguno de los privados de libertad que apoyaron la acción, comió desayuno ni almuerzo, como medida de protesta por el mal trato que se da a los reclusos. Paralelo a la huelga, familiares de los privados de libertad formaron una cadena humana frente al Ministerio Público.

Dicha fundación presentará una denuncia ante la Corte Suprema de Derechos Humanos, por violaciones a los derechos humanos. El Ministerio de Gobierno y Justicia no los atendió.