El "pelucón" lo delató. José Pirtea Aguilera, de 32 años, quien estaba evadido de la cárcel La Joyita desde enero del 2007, se hizo pasar por policía para presuntamente robar un banco en la Avenida Justo Arosemena.
Él tenía encerrado en el baño de los estacionamientos del banco al guardia de seguridad, quien estaba maniatado y acostado boca abajo. Además del uniforme policial, Pirtea tenía un arma de fuego y un radio de comunicaciones con frecuencias de la Policía Nacional.