[
Imprimir]


HISTORIA
El ladrillazo

Redacción | DIAaDIA

Un joven y exitoso ejecutivo paseaba su auto Jaguar S Type 2003, sin ningún tipo de precaución. De repente, sintió un golpe, pues había recibido un ladrillazo que afectó la pintura, carrocería y vidrio del lujoso auto.

Allí sorprendió a un chiquillo y lo empujó hasta el lujoso carro y le gritó:

-"¿Qué rayos fue eso? Eso que hiciste te va a salir muy caro".

-"¡Por favor, señor, lo siento mucho! Le lancé el ladrillo porque nadie se detenía..." Llorando señaló a su hermano tirado en el piso, pues se había caído y no lo podía levantar.

-"¿Puede usted, por favor, ayudarme a sentarlo en su silla? Soy muy pequeño".

Muy impactado, el ejecutivo tragó grueso. Y asistió al joven discapacitado y limpió sus heridas y las partes que se había ensuciado. Luego de verificar que se encontraba bien, miró al chiquillo, y le dio las gracias con una sonrisa indescriptible.

"Dios lo bendiga, señor... y muchas gracias", le dijo. El hombre vio cómo se alejaba el chiquillo empujando con dificultad la pesada silla de ruedas de su hermano, hasta llegar a su humilde casita.

El ejecutivo nunca reparó la puerta del auto para recordar el ladrillazo y así tener presente no andar distraído y tan de prisa que alguien tenga que lanzarle un ladrillo para que preste atención.

Tú escoges: Escuchar el susurro o el ladrillazo... Ahora tíraselo a un amigo.





Ciudad de Panamá 
Copyright © 1995-2010 DIAaDIA-EPASA. Todos los Derechos Reservados