La fémina fue obligada a sacar dinero de tres cajeros, pero al notar los delincuentes que no tenía fondos en su cuenta bancaria, la golpearon y procedieron a abandonarla en su propio vehículo. Como pudo, llamó a un amigo, quien la socorrió. Producto de los golpes, tuvo que ser recluida en el hospital Santo Tomás, donde fue sometida a una cirugía. Sus familiares piden a las autoridades que se investigue.