Una vez me quejé ante mi maestra de escuela porque creía que nunca entendería la materia, y jamás saldría de ese pueblo de pobres donde nací. Ella me refutó con el siguiente argumento:
Comienza con lo que tienes, no con lo que te hace falta. Tú ya tienes todo o qué necesitas para comenzar a crear tu futuro.
No exageres la importancia de las cosas que no tienes. No permitas que aquello que no puedes hacer, te impida hacer lo que sí puedes. Para la mente que vacila, todo parece imposible.
No esperes que existan circunstancias extraordinarias para hacer el bien, hazlo en las situaciones comunes.
El encanto de lo distante y lo difícil es engañoso. La gran oportunidad se encuentra donde está.
Lo que puedes hacer ahora es la única influencia que tienes sobre tu futuro. La grandeza verdadera consiste en demostrar excelencia en las pequeñas cosas.
Nunca alcanzarás mayores logros, a menos que te lances antes de estar listo. Nadie logró el éxito mientras esperaba que todas las condiciones fueran ideales.
La Biblia dice: "el que al viento observa, no sembrará; el que mira a las nubes, no segará".
No pierdas el tiempo con dudas y temores acerca de lo que no tienes. Dedícate de lleno a terminar la tarea que tienes entre manos.
Fue una gran lección. Ahora que soy médico lo compruebo.
~051505-DD-11-historias~
|