Pasa inadvertido. Casi nadie lo ve, pero aun así los niños acuden allí a jugar, porque no hay otro más.

Ese es el parque infantil de Nuevo Caimitillo, ubicado detrás del Subcentro de Salud del lugar, que a medida que pasa el tiempo se va deteriorando.

Los aparatos de juegos se están oxidando, piden a gritos una mano de pintura.

Los conocidos columpios están dañados, sólo unos dos funcionan y eso porque les han colocado un pedazo de madera, que sirve para que los niños se sienten y puedan mecerse.

Los residentes aseguran que el parque tiene más de 3 años de estar en completo abandono. Antes, una empresa privada le daba mantenimiento, pero eso ya pasó a la historia.

Lo único rescatable es que los alrededores se mantienen limpios.

Como están al aire libre, con las lluvias los aparatos de metal se van deteriorando cada vez más.