La noche del viernes, Yeiska Esmeralda Dean Valenzuela, de 15 años, iba hacia la tienda junto a unos amigos, cuando fueron sorprendidos por una balacera que se registró en la entrada de calle "R" en Cerro Viento.

Ella tenía planeado ir con sus amigos a una fiesta, pero fueron cuatro disparos los que acabaron con las ilusiones de esta quinceañera, quien cursaba el IV año en el Colegio José A. Remón Cantera.

Yeiska deseaba ser cirujana plástica, aunque siempre luchaba por los derechos de las personas para que todos fueran tratados por igual.

Los gritos y llantos de los jóvenes que iban con Yeiska dejaron perplejos a los vecinos, quienes salieron a ver qué ocurría y no podían creer que ella estaba sin vida tirada en el medio de la calle. Algunos vecinos expresaron que en 40 años que tienen de vivir en Cerro Viento es la primera vez que ocurre este tipo de hechos que deja de luto a una familia y sin vida a una joven alegre y amigable.

METAS

Warren Dean, tío de la menor de edad fallecida, recordó que su sobrina siempre, cuando estaba libre, se iba a Pacora o para Arraiján a pasar con su tío y madrina. "La última vez que la vi, se la pasó pegada de la computadora en Facebook", dijo Warren.

Ayer, calle "R" no era la misma, pues los vecinos entristecidos se reunieron en la casa de la familia Dean, para dar consuelo a Oliva Valenzuela y a Lee Omar, madre y hermano, respectivamente, de Yeiska.

Al fondo de la calle, la imagen de una virgen que fue testigo mudo del hecho de sangre, es una muestra de la armonía de la comunidad, especialmente de la calle R, donde aún están los arcos que coronan la calle con mensajes navideños que adornaron la fiesta del nacimiento de Jesús.

SIN DETENIDOS

La balacera se dio entre sujetos a bordo de unos autos, por este caso no hay nadie detenido.