El director del SINAPROC, Arturo Alvarado, hace unas semanas advirtió que las lluvias más severas estaban por llegar, y le pidió a los ciudadanos que asumieran las acciones necesarias para evitar sinsabores y tragedias.

Los panameños, como siempre, no escucharon las palabras de Alvarado, y ayer las aguas se tomaron la ciudad. Muchos ríos se desbordaron, se inundaron las calles principales y los estragos fueron mayúsculos en los principales distritos de la provincia de Panamá.