"Gracias a Dios, porque sin Él no somos nada". Esa es una de las expresiones más comunes que tiene el joven Enrique Alberto Pérez Chiel, después de permanecer 9 meses embarcado, como requisito obligatorio para optar por la licencia como Oficial de Marina Mercante y ejercer, en propiedad, la Licenciatura como Ingeniero Náutico, con especialización en Navegación y Transporte Marítimo. De esta manera se convirtió en el primer panameño en ser aceptado por la empresa naviera Nippon Yusen Kaisha (NYK) para alcanzar ese objetivo.

Admite que cuando un cadete llega a bordo de una embarcación Post Panamax en alta mar, definitivamente la vida no es la misma, todo cambia.

A este estudiante de la Universidad Marítima Internacional de Panamá (UMIP) le tocó enfrentarse a una cultura y costumbres diferentes. Al estar rodeado de marinos filipinos, percibió cierto recelo, pero sabía que tenía un compromiso con su país, su familia y su universidad.

"Puedo decirles a los futuros cadetes o aspirantes a oficial que deben pedirle fuerzas a Dios, que es el único que se las puede dar cuando están solos a bordo. Allí no habrá nadie que los ayude y deben demostrar lo que saben y lo que son", destacó.

Esos sacrificios valieron la pena, pues son el inicio de su carrera para llegar a ser capitán en la flota de buques de la compañía NYK.

Al terminar sus labores como cadete pasó a prepararse como tercer oficial, donde se encargaba de la preparación del puente de navegación antes de zarpar.

Durante los últimos quince días de embarcación pasó su prueba de fuego, pues el capitán del buque le cedió la guardia solo, pero supo tomar control de la situación.

Este joven es egresado de la Escuela Secundaria Pedro Pablo Sánchez de La Chorrera, reside en la barriada El Mastranto y es hijo de Enrique Pérez y Noris Chiel. Durante su viaje recorrió países europeos como Inglaterra, Holanda y Alemania, mientras que en el continente asiático visitó Singapur, China y Malasia.

MUY CONFIADO

En julio, Enrique Alberto Pérez Chiel regresará como oficial en uno de los buques de NYK.